Tanto si vas a elegir una vivienda y más aún, si estás en el proceso de construir tu propia casa, debes tener en cuenta varios criterios de valoración, si lo que deseas es desenvolverte con éxito en cada parcela de tu vida.
El hecho de que al visitar una propiedad sientas amor a primera vista, o te maravillen sus vistas, su distribución o su diseño, puede ser un factor decisivo a la hora de decantarte por una opción. Esto es debido a los estímulos que recibes de tu entorno que establecen conexiones con tu mente activando alertas de tu cerebro. Estas conexiones tienen que ver con tu nivel de consciencia.
Dejarse llevar por estas sensaciones puede ser lo más lógico. Sin embargo, esto significa dejar de lado un dato fundamental: la influencia que supone cada estancia de la vivienda en el transcurrir de tu vida. No siempre el vínculo, que a priori has establecido con ese lugar, supone vivir experiencias positivas en él. El hecho de que te hayas sentido atraído por ese diseño, o incluso que lo hayas delegado en tu arquitecto, no supone recorrer un camino de rosas: significa que en tu momento presente estás preparado para vivir en ella lo que se te planteará en cada aspecto de tu vida, con sus éxitos y dificultades.
Pero siempre puedes dar un paso más, y preguntarte ¿es esta la opción que me hará feliz tanto a mi y como a mi familia? Y elegir. Depende de ti estar dispuesto a tomar las acciones necesarias para que las experiencias de vida en tu nuevo hogar sean lo más placenteras posibles al nivel que deseas: en tu vida profesional, en la salud, en la relación con tus hijos…
Como habrás observado, no me estoy refiriendo a que todas tus necesidades en la vivienda estén cubiertas, sino a otros aspectos imperceptibles que tienen que ver con las cualidades energéticas del momento, del lugar (esencia yin y yang) y de su vínculo con el ser humano. Estas características del entorno y del momento presente son las responsables de una vida en plenitud a través de la correcta distribución de la vivienda.
Por eso, la construcción de una casa es una oportunidad de oro para ubicar correctamente cada estancia, con el convencimiento de que todo está en el lugar adecuado para favorecer todos los aspectos de tu vida a largo plazo. Y también decantarte con seguridad por una u otra opción en la elección o reforma de vivienda.
Hacer un estudio del entorno y del momento de construcción de la propiedad según parámetros basados en feng shui da las claves para saber qué orientaciones son las más favorables para ubicar las distintas estancias en cada sector.
De esta manera, el ránking de cada pieza de la casa, por orden de importancia es el siguiente:
1. PUERTA PRINCIPAL:
La puerta de entrada a una vivienda es el primer contacto que se tiene con la casa y la zona por la que entran y salen todos los habitantes de la casa. Es como la entrada de oxígeno al hogar. Debe situarse en la fachada principal, con un frente abierto, un gran espacio libre y bien cuidado. Del mismo modo, el recibidor ha de ser amplio, un lugar de acogida y la antesala al resto de la vivienda. La puerta principal, debe estar orientada hacia un espacio yang positivo, para favorecer las cuestiones materiales, bienes, economía, etc. Una puerta mal ubicada, repercute en estos aspectos.
2. DORMITORIO PRINCIPAL:
El dormitorio principal es la habitación de los responsables de la familia, de ellos depende el bienestar de los demás miembros. Además, los dormitorios son los lugares donde más tiempo se permanece y su influencia en las personas es mayor. Por estas razones, su correcta ubicación favorece la salud de sus ocupantes y fomenta las buenas relaciones personales, de lo contrario habrá dificultades en estos ámbitos. Deben situarse en una zona de esencia yin positiva. Si no se conocen estas cualidades del lugar, procura que sea un sector pasivo, silencioso, con luz tenue y con un exterior que apoye estas características, siendo un espacio poco activo, frondoso y con volúmenes altos. Dentro del dormitorio hay que prestar especial atención a la orientación de la cama y que su posición favorezca a sus ocupantes.
3. SALÓN:
Es la tercera estancia más importante de la casa porque es el lugar de reunión de todos los miembros, donde se comparte el tiempo de ocio en familia. Es importante situar el salón en un espacio predominantemente activo (yang positivo) lo que supone que tenga el apoyo del exterior siendo también un espacio abierto, con calles o plazas amplias y zonas verdes. El aspecto yang de un sector favorece los bienes materiales y las oportunidades.
4. COCINA:
Es el lugar responsable de la alimentación y nutrición de la familia, su esencia es yang y debe situarse en un lugar de características similares al resto de espacios yang de la vivienda, como el salón. Por eso, muchas veces es bueno vincular la cocina y el salón. También hay que prestar especial cuidado a la zona de preparación de los alimentos, y ubicar en la orientación adecuada la vitrocerámica, el horno y todo aquello que produce calor. Esta orientación, además, debe favorecer al chef de la familia.
5. DORMITORIOS SECUNDARIOS:
Estas son las habitaciones ocupadas por el resto de miembros de la familia. Forman parte de los espacios destinados a favorecer la salud, el reposo óptimo y las buenas relaciones con los demás, ocupando la segunda posición entre los sectores yin. Lo que hay que tener en cuenta es, aparte de su ubicación, la orientación de la cama a favor de la persona que duerme allí y de la zona de estudio, diferente para cada persona.
6. DESPACHO:
Muchas veces es necesario situar una zona de trabajo en casa, que puede estar compartida o no con otras estancias. En el caso de que este espacio sea fundamental para la economía familiar o directamente se trabaje en casa, este lugar deberá ocupar la tercera posición en el ránking. Dependiendo del tipo de actividad habrá que situarlo en una zona u otra de la casa, pero siempre para favorecer la prosperidad económica.
7. COMEDOR Y ZONA DE ESTAR:
Estas zonas pueden considerarse secundarias dentro de los espacios activos de la vivienda. En caso de ser los lugares que más se usen (en vez del salón) habrá que darles mayor prioridad y ocupar sectores más positivos dentro del perímetro de la vivienda.
8. PASILLOS Y ESCALERAS:
Estas son zonas de paso y de no permanencia y muchas veces vinculados con el centro de la vivienda. El centro es como el corazón que bombea la energía al resto de la casa y su cualidad es yin. El centro de la vivienda, salvo que sea un patio abierto, es recomendable que sea un lugar tranquilo, sin mucha actividad, evitando situar las escaleras en este sector.
9. GIMNASIO:
Es el lugar del cuidado físico y también mental, por lo que puede ocupar sectores pasivos y activos, en función del tipo de ejercicio a realizar. Puede ser un espacio yin, para realizar ejercicios de yoga o taichí o incluso terapias como reiki o meditación o bien ser un espacio yang para realizar ejercicios aeróbicos o crossfit.
10. CUARTO DE BAÑO:
A pesar de estar situado en el último lugar del ránking, no son los lugares menos importantes, sobre todo cuando se le presta una atención especial. Un cuarto de baño bien diseñado, con unas buenas proporciones que permitan pasar tiempo en él, puede favorecer el bienestar físico y la salud situándolo en una zona yin. Por eso es una buena opción cuando forman parte del mismo sector al que pertenece un dormitorio.
A pesar de este ránking, no todos los sectores en una vivienda son positivos. A veces resulta muy difícil que todo esté en el lugar perfecto. Por eso, lo importante es priorizar los aspectos que para ti son los más importantes en un momento de tu vida, y a partir de ahí actuar a través de la correcta distribución de cada estancia de la vivienda.
Gracias Esther.
Gracias Por su orientacion.
Muchas bendiciones.
Gracias. Amor.
Namaste.
Gracias a ti, Rosa.
GRACIAS POR TRANSMITIRME TAN POSITIVAS RECOMENDACIONES PARA NUESTRA VIVIENDA A TENER EN CUENTA.
Espero que te sean útiles, Cristina.
Un saludo.