El ritmo al que te mueves en cada aspecto de tu vida te define como una persona más yang o más yin. El sentido del tiempo es relativo y variable en cada persona y tiene mucho que ver con ¡los 5 elementos! De eso nos habla el arte del Ba Zi, que establece cuáles son los elementos aliados y cómo influyen en el carácter de una persona. Por eso, Ba Zi, está muy relacionado con Feng shui.
¿Has oído hablar de ello? Si te resulta completamente nuevo, sigue leyendo porque hoy te traigo un caso que he tenido en el estudio para que veas la afinidad entre estas dos partes de la metafísica china. Descubrirás qué tipo de conexión existe entre la fuerza vital de una persona y el espacio que ocupa en su casa o en su despacho. 🙂
Pero antes, te abro una ventanita del Ba Zi con esta pregunta:
¿LIEBRE O TORTUGA?
Antes de responder, ten presente que no se trata de ser mejor o peor, de ser más lento o más rápido, sino de entender que cada persona posee una determinada percepción del tiempo, según su propia esencia. Personas más activas junto con personas más pasivas reflejan una diferencia de ritmos. Para un mismo espacio de tiempo, a una persona le puede suponer una eternidad y para otra muy poco tiempo.
Sin embargo, lo más sorprendente es que de repente, para momentos muy puntuales, se puede reaccionar de forma totalmente contraria a la habitual, pasando de tranquilo a vivaz o de apresurado a calmado.
¡Eso es yin y yang, el equilibrio! Siempre, dentro de yin hay yang y viceversa. Dentro del uno hay un pedacito del otro, es totalmente necesario porque supone la chispa que provoca la transformación. Si todo es igual, no evoluciona.
Por eso, qué mejor momento que este para hacerte una pequeña introducción sobre un tema completamente nuevo, del que hasta ahora nunca te había hablado: Ba Zi ó los cuatro pilares. Se trata de una rama de la metafísica china muy vinculada con Feng shui. Es como si fuese un Feng shui “personal”. Pero ¡ojo! al hablar de Feng shui siempre nos referimos a espacios físicos, entornos, edificios o viviendas. Ba Zi, sólo tiene que ver con la persona.
El estudio de Ba Zi es una parte fundamental a la hora de establecer la afinidad con una vivienda. Cada persona es única y su conexión con la fuerza vital de cada lugar que habita, también lo es.
Al igual que en Feng shui se trabaja con los ciclos de los 5 elementos, en Ba Zi, una persona también posee su Cesta de elementos, metal, madera, fuego, tierra o agua. Uno de ellos, en su variante yin o yang representa tu Elemento Maestro. Este elemento y su fortaleza, determina el rol que se establece con el resto de elementos.
Cada elemento hace referencia a un tipo de carácter, y, según el número de veces que aparezca en la carta, generalmente, hace alusión a tus dones y talentos, a tu personalidad, al desarrollo de tu vida, y, por supuesto, a tu concepto de tiempo, que es de lo que te hablo hoy.
Conocer los elementos que determinan tu vida es adelantarse a cada acontecimiento, poder tener perspectiva de las cosas y actuar en consecuencia para lograr el éxito en cada acción que emprendas. Y, por supuesto, saber el tipo de afinidad que puedes tener con tu vivienda o lugar de trabajo, qué puede ofrecerte ese espacio o qué dificultad puede plantearte.
Como te comentaba al principio de este artículo, hay personas que son más aceleradas y otras más pausadas. Esto es porque, entre otras cosas, las personas más “activas” poseen como elemento dominante aquel que produce su propio elemento. Por ejemplo, el elemento fuego produce el elemento tierra, por lo que una persona cuyo elemento maestro sea el fuego, genera tierra. Si posee mucha tierra en su carta, está indicando que es una persona muy activa; la tierra es su rendimiento.
Por el contrario, para una persona del mismo elemento fuego, si posee como elemento dominante el que produce el fuego, es decir, mucha madera, indica que es una persona que posee mucho recurso. Probablemente se trate de una persona muy pensativa, reflexiva y pausada.
¿Lo vas viendo?
Una persona con mucho rendimiento necesitará lugares que promuevan su actividad, espacios yang para dar rienda suelta a su creatividad. Suelen ser personas muy creativas, artistas, emprendedores.
Una persona con mucho recurso es una persona más yin. Se mostrará más tranquila, reflexiva y tenderá a buscar lugares más sosegados, lugares yin. Son buenos analistas, profesores e incluso filósofos, recaban datos y los analizan.
Sin embargo, en según qué momentos, una persona más activa, necesitará ratos de reflexión y de pausa y una persona más quieta, necesitará momentos de actuar y pensar menos. De esta manera se establece el EQUILIBRIO, necesario para evolucionar.
Así pues, a cada persona, su espacio, el ámbito que mejor encaja con su propia naturaleza.
APLICACIÓN EN UN CASO PRÁCTICO
Hace poco, tuve un caso muy cercano en el que la reforma de su despacho puso de manifiesto este tema.
Esta persona estaba perfectamente ubicada en su oficina, donde la disposición del mobiliario, actuaba de protección en todos sus lados. También estaba orientada frente a una de sus direcciones favorables, y por supuesto, el qi de ese sector era positivo.
Se habían seguido los requisitos que aparecen en la Guía de Arquitectura y Feng shui (por cierto, si aún no la tienes, no esperes más y descárgatela aquí).
Esta persona estaba muy cómoda, pero ¡faltaba la chispa! Se trata de una persona del tipo de “recursos”, es decir, con un número elevado del elemento que nutre a su Elemento Maestro. Por tanto, una persona tranquila, pensativa, estudiosa, reflexiva y trabajadora. Pero le faltaba la fortaleza del elemento que su Elemento Maestro produce, es decir, “rendimiento”, ACCIÓN, para que todo su conocimiento saliera a la luz.
Por eso, la sacamos de su zona de confort y probamos a situarla en otra posición. Aprovechamos la fuerza vital (el qi) del sector Este, que posee una combinación energética que favorece el emprendimiento, las relaciones profesionales, red de contactos y promueve la creatividad. Además, este año está ocupado por un qi muy positivo para los emprendedores. Era perfecto. Situamos el mobiliario estratégicamente y… a esperar…
Pues bien, al cabo de unas semanas, esta persona me cuenta que los primeros días no era capaz de estar sentada en la silla por mucho rato, cuando antes, en su otra ubicación podía pasar horas y horas sin levantarse. Por otro lado, ha pasado muy poco tiempo trabajando en ese lugar debido a que ahora su trabajo le obliga a viajar y estar en contacto con otras personas fuera de su estudio. Y lo mejor, que cada acción emprendida ha obtenido un pequeño fruto.
Mi interpretación en este caso es: Por un lado, el qi esencial de la persona (pausa, tranquilidad, tiempos largos…) ha reaccionado con el qi del sector que ocupa en ese momento, (estrella 9) un qi muy activo, dinámico y de tiempos cortos. Esto ha provocado que esta persona necesite un tiempo de transición para asimilar esa reacción, que es bastante positiva, pero que precisa de un periodo de adaptación. Yin y yang.
Por otro lado, el no estar tanto tiempo en el despacho, ha provocado el desarrollo de su actividad fuera, en conexión con otras personas, aprovechando la fuerza vital de su sector Este con resultados muy productivos.
Así pues, esta persona ha encontrado su equilibrio a través de su espacio (persona ying en zona yang). Ha conectado con su “rendimiento” para sacar provecho a su conocimiento (recursos), a su propia esencia.
De esta manera actúa Feng shui y así te encamina hacia tu éxito.
A mí no para de sorprenderme el efecto que posee el entorno en el que nos movemos y cómo conecta con el ser humano. Tener conocimiento de nosotros mismos y de todo lo que nos envuelve puede hacer que la vida sea maravillosa. ¿No crees?
gracias, por tus tips interesante
Gracias a ti Nubia.
Un saludo.
Excelente la nota y muchas gracias por compartirla. También soy de aplicar bastante el Feng Shui de acuerdo a la personalidad de cada individuo y justamente ayer estaba tratando de armonizar un ambiente donde pasa que las 2 personas que conviven en el lugar son totalmente opuestas: una es más Yin y la otra es más Yang. Es todo un desafío!!!
Vuelvo a agradecerte por compartir tus experiencias
Muchas gracias por tu comentario, Facundo.
Animo en tu desafío y piensa que siempre hay algo en uno que es lo que complementa al otro. ¡Seguro que lo encuentras!